martes, 15 de mayo de 2012

Comentario: Mad Men 5x09 - Dark Shadows


“This is irritating”

El conflicto de clases se puede resumir como el conflicto entre los que tienen y los que no. Es también el corazón de casi toda la ficción, desde la novela rusa a las novelas de la tarde. Es obviamente, el conflicto en Mad Men de vez en cuando, aunque en este caso, fue más del tipo “el conflicto entre haber tenido y tener”.
Una de las figuras centrales del episodio fue el árbol genealógico que estaba armando Sally Draper, con esas complicaciones tan de segunda mitad del siglo XX que son las familias ensambladas. Si tuviera alguna habilidad gráfica, yo comentaría este episodio armando mi propio árbol de celos y rivalidades: Betty claro envidia a Megan que tiene la figura que ella alguna vez tuvo, a “su” marido y hasta la simpatía de su hija. Don ve como Michael lo está dejando creativamente detrás. Peggy hasta cierto nivel, también, y envidia que hasta la hayan dejado a un costado para los negocios espurios. El del negocio espurio, claro, es Roger, que con tal de superar a Pete pone todo en juego. Incluyendo a Jane, a quien termina de todas maneras celando ante un modelo más nuevo. Jane, mostrando lados que ni le conocíamos, claramente envidia la atención que Joan siempre fue merecedora a los ojos de su ex marido (“no es una profesional, o algo así?” Perrísima, una de las mejores líneas del episodio, lleno de líneas perrísimas). Pete envidia a Howard por su esposa (quien aparece en una de esas ya demasiado recurrentes escenas imaginarias que quedan fuera de registro en el programa). Megan, un poco más equilibrada, es envidiada por Betty y su compañera de actuación, pero está claro que también envidia la posibilidad de actuar en Dark Shadows que se le presentó a ésta. Y tanto Betty como Megan envidian en cierto nivel al fantasma de Anna, tan presente como la última vez que la vimos en “The Suitcase”.
Igual, mientras que toda la “vieja generación” recurre a tácticas sucias (lo de Don con la campaña de Michael es realmente bajo, aunque un juego de niños ante la barbaridad que hizo Betty) y a la agresión pasiva, la nueva generación va de frente: en una clara asimetría de fuerzas, Peggy lo enfrenta a Roger y Michael a Don, pero la que se lleva los premios es Megan, no sólo por blanquear inmediatamente con Don el asunto Anna, sino por leer a la perfección las intenciones de Betty y negarle la satisfacción.
Igual, para nuevas generaciones, no hay como Sally... una destilación de las características más maquiavélicas de sus padres, que encima se está entrenando para la manipulación profesional. Megan cuidado... si le das un arma en el primer acto, seguramente será disparada en el tercero.
Algunas observaciones al paso:
  • Polarizante como es el personaje de Betty, está claro que es central y necesaria al programa. Desde el divorcio que no saben muy bien que hacer con ella, sumado al embarazo de January Jones, pero pocos personajes tan claramente representan el concepto de “love to hate you”.
  • Sigo fascinado por lo buen marido que es Henry para Betty. Betty claro, es incapaz de apreciarlo. Algunos comentaristas americanos criticaron que “Betty ya no sabe ni con que está insatisfecha”. Claro que no, lean un cacho sobre histeria muchachos, la Señora Francis es la histérica mejor escrita de la TV actual.
  • Finalmente un encuentro entre Betty y Megan! Y fue todo lo que esperábamos. Betty en el departamento fue un momento de identificación absoluta (vamos, ¿quién no moriría por revisar impunemente el depto del ex con la actual?), y la “ventana hacia el pasado” de Megan en corpiño me hizo tenerle un poco de lástima. Hasta que abrió la boca sobre Anna, claro. 

7 comentarios:

  1. En este capítulo, Betty demuestra ser la villana number one. Sufriente y patética, masticando cada bocado mientras los cuenta y saborea, va gestando ideas maquiavélicas para destruir la poca armonía que hay en la vida de Don.
    Envidia, envidia y la típica figura de la ex. Amo a esta histérica. La amo y si desaparece de la serie, la abandono ipso facto.

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    1. Totalmente, para mi es imprescindible también. Te diría que para mi Mad Men dejó de ser " ah si, una serie que está bien" a "soy fanático" fue con el episodio en que le dispara a las palomas. Es decir, entré en Mad Men por Mad Betty

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    2. Para mí Betty es un fenómeno extraño, como Dexter. Uno mira esa serie, Dexter asesino de asesinos, y lo quiere. ¿Cómo puede ser que un asesino nos provoque quererlo? Lo mismo me pasa con Betty: es mala mujer, mala madre, mala esposa, mala hija, mala hermana... pero su sufrimiento como persona me hace quererla un poco. Me declaro fanática de este personaje histérico. Miro Mad Men esperando verla a Betty y sorprenderme observando cuál es su próxima maldad.

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    3. Te subo la apuesta, entonces: Tony Soprano. Imaginate lo peor de Betty y Dexter, juntos. Y sin emabargo, no podés dejar de empatizar a cierto nivel.
      Cuando tengas una ventanita de tiempo, los 86 episodios de Sopranos es probablemente lo mejor que puedas hacer.

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    4. Sabés bien que si me recomendás una serie, estoy obligada a verla. Me estás convirtiendo en una fan de las series! Tengo que vivir también!! =D

      El año pasado conseguí la season 1 y nunca tuve tiempo de verla. Tenés las siguientes o comienzo a buscar?

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    5. Tengo los DVD originales de toda la serie...

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    6. Bueno, ya sabés. El lunes los espero con ansias! Doy por sentado que me los prestás porque vos esparcís el amor por medio de las series.

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